GOLPE PUBLICITARIO PARA EXHIBIR Y DESACREDITAR A LOS MAESTROS
Un examen que carece de toda base científica y sólo sirve para exhibir la enorme necesidad de trabajar que existe en este país y que el auto llamado presidente del empleo, JeliPILLO Calderón no crea, obliga a decenas de miles de profesionistas a concursar miserablemente por una plaza, en donde, similar al juego del “sube Pelayo sube”, todos los concursantes son exhibidos y ridiculizados por los organizadores.
La SEP y el SNTE aplican un examen, sin base científica; un examen a modo. Que además de exhibir a los maestros y justificar una campaña mediática difamatoria, echando la culpa sobre el magisterio del desastre educativo provocado por los gobierno neoliberales, el PRI, el PAN, Josefina Vázquez Mota, Lujambio, Fox, Calderón, Elba Esther Gordillo, etc.
Este examen permite continuar con el negocio del CENEVAL, institución privada cuyos socios ven incrementadas sus ganancias con los exámenes sin sustento científico y “verificados” por la misma SEP y la gente corrupta de Elba Esther Gordillo en una supuesta instancia “independiente”, que es una burla.
Desde la madrugada del domingo 25 de julio, el gobierno federal PANista, reflejando el odio que tiene a la educación pública, colocó en la web de la Secretaría de Educación Pública (SEP) la publicidad de los resultados de la evaluación, en los que se señalaba que 39 mil 141 (26.1 por ciento) había aprobado el examen, mientras que 103 mil 86 maestros (70.6 por ciento) fueron ubicados en proceso de nivelación académica, y 3 mil 746 (2.5 por ciento) reprobaron. Datos erróneos, porque la misma página web a las seis de la tarde del mismo día, modificó los números y emitió un comunicado de prensa en el que aseguró que se incrementó el número de académicos en nivel de aceptable y se redujo a la mitad el porcentaje de los ubicables como no aceptables.
Las nuevas cifras de la SEP, quedaban en 44 mil 565 aprobados, mientras que el total de aspirantes en proceso de nivelación académica se incrementó de 103 mil 86 maestros a 105 mil 352.
Los aspirantes que demandan una plaza docente para el ciclo escolar 2010-2011 es de 178 mil 324. Sin embargo, sólo hay disponibles 22 mil 546 plazas de jornada y 119 mil 883 horas/semana/mes: La suma de ambas opciones dan 32 mil 586 plazas efectivas para igual número de aspirantes. Por lo que 11 mil 981 concursantes que aprobaron la evaluación no recibirán la plaza prometida.
La SEP pretendió justificar su grave error, reconociéndolo, pero… señalando que la dependencia tuvo problemas en el manejo de datos, y que por error se subió a la red información equivocada; no obstante, aseguró que los resultados reales fueron entregados ante notario público hace varios días, y confió en que se puedan hacer las aclaraciones que correspondan. Si alguien subió (datos) incorrectamente fue el Instituto Latinoamericano de la Comunicación Educativa (ILCE) se tendrá que investigar, porque se les entregó la misma “numeralia” que al notario.
INCAPACIDAD PARA DEFENDER CONQUISTAS
PRIMERA GENERACIÓN DE LA RES
La ilegalidad del examen es notoria. Violenta la Ley Federal de los Trabajadores al Servicio del Estado y la Constitución se quejan profesores en servicio y los egresados de la Normal Superior, mientras los comisionados “democráticos” en la sección 10 del SNTE siguen con su sectarismo, jugando el triste papel de “certificadores de virginidades políticas”, que llevó a la derrota del movimiento de rechazo a la RES. Los comisionados democráticos brillan por su ausencia e incapacidad para organizar la defensa de los derechos de los maestros lesionados en sus derechos, muchos de los cuales han sido avisados de que están cesados.
Este año egresó la primera generación de alumnos que fueron sometidos al experimento de la Reforma a Planes y programas de Estudio de Educación Secundaria (RES) y los reportes del Instituto de Evaluación Educativa señalan que no hay progreso alguno, mostrando dónde está la verdadera causa de la crisis educativa, en las planeaciones de escritorio.
Recordamos la resistencia del profesorado de las escuelas del Distrito Federal que enfrentándose a los charros, directores e inspectores rechazó en el 95% por ciento de las escuelas secundarias la RES; levantaron actas de protesta, con nombre y firma, pero el sectarismo ramplón del CCL llevó a la más grande derrota el movimiento. El infantilismo político desvió la lucha de la base trabajadora a una lucha de héroes.
