¿Por qué el educando no siente y disfruta el placer en el aprender?
Será porque el docente no disfruta este placer y por lo mismo es incapaz de transmitirlo.
Todos tenemos el nombramiento de profesor, pocos reciben de alumnos o ex alumnos el apelativo de MAESTRO.
Del profesor recibimos el conocimiento.
Con el Maestro gozamos del conocer.
El profesor cobra y limita su trabajo a lo ordenado.
El Maestro explora más allá del temario sin esperar recompensa.
Quien auto limita y subordina el conocimiento al orden es un buen profesor. Cumplido, sistemático, el del encuadre perfecto, incapaz de criticar. Apoyado en un falso apoliticismo o neutralismo político que defiende lo establecido. Justifica lo existente y huye del cambio. Castrado por el dinero.
El profesor expone, el Maestro explora conmigo.
Hoy entiendo el orgullo de ser maestro.
* Enviado por un alumno de la ENSM